8 de noviembre de 2013
“Ir a un concierto
de los Pixies es como reencontrarse con aquel amor del pasado -platónico o
consumado- que se presenta elegantemente vestido, mucho más guapo de lo que
recordabas y, a pesar del chute de felicidad, no consigue revivir las
sensaciones de entonces”. Darío Prieto. Las banderas, tanto izar y arriar, se deshilachan.
Bailaremos sobre su tumba. Deben pasar años para una melancolía irónica y
desapasionada como la de ‘Indie Cindy’. Todas las pistas de baile, desiertas.
Me consta que hay pájaros que emigran y mueren por el camino. Perdieron estabilidad. O les faltó un poco de agua.
Brizna de media asta
