24 de mayo de 2017
“Cuando en
el mundo había muchos oficios, / se veía en una iglesia a un Arcángel / que
pesaba almas (…) / Mas, andando los tiempos, / comenzó a pesarlas y a medirlas
un famoso médico / vienés, Herr Doktor Professor Sigmund Freud, / y luego ya no
hubo almas, y las gentes se sentían / más ligeras y huecas”. Jiménez Lozano, Los retales del tiempo. Ya no volaban
donde querían, pendían cual hoja volandera. La vida se manifiesta en los intersticios.