31 de mayo de 2011
"El cambio que nos destroza nos llega siempre cuando estamos instalados en lo mejor". Shakespeare en Rey Lear. O, cuanto más alto, más durá será la caída. Ni con un bastón metafísico lograremos palpar, a un metro, el suelo terminándose bajo nuestros pies. El precipicio, igual que el futuro, no se adivina. No se presiente, se siente.