28 de febrero de 2018
“Estas
sombras nos lavan, / con su misterio imponen una enorme / intemperie”. Diego
Doncel, El único umbral. Levita el
que conoce las formas; los despeñaderos de luz se protegen del agua incensaria
del recuerdo; y “los hombres / (…) / alimentan en vano / su ansia de absoluto”.
¿Por qué la “claridad dilata” y hay “blanco respirado en los cielos”, si “tu
piel es el agua oscura del misterio”, “agua oscura es tu cuerpo”? Tú cometes un
crimen en tu nombre e imaginas la sangre en un cuadro de Pollock. “Tú te
viertes en todo, haces signo / el paisaje” sin árbol de la memoria, consistente
en “flores sin nombre”. Y te preguntas: “¿Y no he de limpiar (…) mi vida / en
el rocío que viene de los cielos?”. Perderte
en / las cosas del mundo será / lo que te redima.