Brizna de verificación

25 de enero de 2016

“Un escritor nunca debería preguntarse por qué o para qué. La única pregunta es cómo”. Raúl Ruiz. Como al soldado la valentía, al escritor se le supone manejo en la palabra. Cada vez, más clara la impresión de que lo determinante no es hacerlo bien, o muy bien, sino aportar algo. El cambio de un periodo a otro en la Historia no lo marcan los temas ni la destreza académica -ni siquiera el pensamiento en primer plano-, sino el estilo y, sobre todo, la forma.

Brizna de visiones

20 de enero de 2016

“Entre las cosas viejas busco / lo nuevo”. Nuno Júdice. Somos hablados desde lo sido. El augurio es una permutación.

Brizna de Historia

18 de enero de 2016

“Tan torpemente como tropieza una y otra vez el apetito de la gallina sobre las piedras, así vamos nosotros”. Antonio Deltoro, Algarabía inorgánica. Cualquier suelo es un restaurante. Cualquier restaurante, un suelo. “Él, rojo (…) llenándose el buche con grandes trozos de carne, había un gesto estúpido y cerril en su rostro gallináceo”. Al Beethoven más sordo le llegaría el cacareo; en la cantina, en institutos y universidades, en la televisión. En los museos: una vez vi a una vigilante de planta sostener Cincuenta sombras de Grey [grey quiere decir, textualmente, rebaño de ganado menor]; tuve que reprimirme para no solicitar el libro de reclamaciones. “Alas de sangre, alas no de aire sino de tufo de corral, manchada por la mezquindad del no elevarse”. Ansia de compresa. “Tienen alas y no vuelan (…) Condenadas por su cobardía a la superficie, llevan en su carne, carne de gallina, el castigo”. El maestro replica al alumno: ‘El que ose levantarse, copiará cincuenta veces no volveré a levitar’. Gallinas todos, quisiera sojuzgadas por el Angelus Novus, tan lejos. Paul Klee representó al ángel hocicudo que miraba al Este a punto de la espantá. “Ve una catástrofe única”, dijo Benjamin. Nos repusimos de la catástrofe viviendo en ella. Ahora la catástrofe tiene grandes ventanales y calefacción central. Y el ascensor, mal que bien, tira de nosotros para arriba. Benjamin, Bataille, Adorno... los autores modernos abrazaron el arte nuevo, aquel que despertó arcadas en el nazismo. La ilusión ilustrada se mantiene en pie gracias a la renovación constante del arte, que es como una renovación invisible atmosférica. De momento, el rascacielos no cede; se tambalea, pero la arquitectura previó que los pisos altos oscilasen. Tomamos té con el Angelus sabiendo que los corrales de la noche hacen de la madrugada un insomnio. El hombre es un gran faisán en el mundo, libro genial de Herta Müller. Faisán, otro ángel caído, misma cabeza, mismas patas; “tienen alas y no vuelan”.

Brizna de huevo o gallina

15 de enero de 2016

“Las islas crean poetas porque ser poeta es estar aislado”. Refrán irlandés. Las islas, ¿son excéntricas o concéntricas? ¿Su dibujo redondo esconde un cóncavo recóndito? ¿Es el mar el núcleo o lo es la tierra firme? ¿Las islas aíslan o aísla el mar? ¿La poesía debe más al mar o a las islas?

Brizna de Bowie

11 de enero de 2016

“El rock tiene un peso completamente distinto. Cuando yo era adolescente, representaba una revolución subversiva, una forma de ser anti-establishment. Ahora se ha convertido en una forma de transmitir información. Probablemente, el papel revolucionario lo ha asumido internet”. Bowie, en 1999. El rock es como la novela: cada año predicen su muerte inútilmente. Sobreviven porque se adaptan al recoveco. Bowie, científico de la música moderna; optimista y agradecido. Sacrifiqué a Vermeer por él en el Victoria and Albert. “La verdad es que amo mucho la vida”. La eternidad se enamoró de ti.

 
 
 

Brizna de cetáceo

7 de enero de 2016

“El hombre tiene siempre el deseo de algún objeto monstruoso. Su vida sólo tiene valor si la somete por completo a esa búsqueda”. Jean Giono, Homenaje a Melville. La oscuridad no se ve, se oye y se palpa. Nos apoyamos en el arte como en una pared -la quinta pared-. Lo usamos para conjurar el ser pulsional que somos, y levantar, en el edificio de la representación simbólica, una habitación para el deseo. Giono se deja llevar paseando y leyendo Moby Dick. “Tal como se afirma varias veces en ese libro, y de manera más bella de lo que jamás podrá decirse, cuando se arponea a la ballena hay que seguir su rastro; cuando se hunde hay que esperarla”. Somos espías disfrazados de personas. Y también podemos ser ballena, o sea, arponeados.

Brizna de enmarcación

5 de enero de 2016

“La claridad, como una veladura, cubrirá el cielo”. Ahmed Hasim. Ahora que radiografían las pinturas, las personas debieran llevar cristal antirreflejo. Velázquez optó por un paspartú y se pintó un cuello de lechuguilla, fabricado con lienzo.

Brizna de pintura al aceite

1 de enero de 2016

“Abramos el telón y dejemos que el juego comience. / Somos actores, aquí nuestro número”. Hoefle-Lewis-Sherman, ‘When the curtain comes down’. El primero de enero es un buen parquet para acuchillar con bailes que recuerden la ficción como vehículo mayor de la verdad. “Algún día la cortina caerá (…) La vida no siempre puede ser una canción”. El horizonte tampoco. Ni promisorio ni inalcanzable. Más vale defenderse de él. Si te aproximas mucho, piensa en Caillebotte; gira el cuello: cada punto cardinal esconde un confín –el norte es una conspiración de las focas-. El horizonte, más que caerse, te tira para después enterrarte. El primero de enero es un volver a empezar. Lo inventamos por que el cerebro respire.