25 de enero de 2016
“Un escritor nunca
debería preguntarse por qué o para qué. La única pregunta es cómo”. Raúl Ruiz. Como
al soldado la valentía, al escritor se le supone manejo en la palabra. Cada vez,
más clara la impresión de que lo determinante no es hacerlo bien, o muy bien, sino aportar algo. El cambio de un periodo a otro en la Historia no lo marcan los temas ni la destreza académica -ni siquiera el pensamiento en primer plano-, sino el estilo y, sobre todo, la forma.