13 de octubre de 2015
“Cuando visité el Museo
del Vicio en París, observé la reiteración de constantes aberraciones sexuales
por vía de restricción, coacción… debería usted solicitar una visita;
naturalmente, también hay cuchillos, guillotina y muchos informes”. Alfred Hitchcock.
El fetichista envidia a los perros, y fantasea ser detenido y convertir al policía
en tonto útil. “Al final de The lodger
el protagonista es atado con unas esposas (…) sicológicamente, la idea llega
lejos”. [Saludos a los limeños] François Truffaut replica: “Creo que no es
exagerado decir que en cierto momento usted quiso evocar a Cristo”; Hitch
asiente: “Naturalmente lo he pensado”. El sexo es religioso en cualquier
fotograma de la vida.